La muerte de un ser querido que solicitaba en un proceso de migración hacia los Estados Unidos es una situación complicada de enfrentar. No obstante, es esencial entender las repercusiones que esto podría tener en la solicitud y cómo se pueden superar.
¿Cómo te afecta?
En el caso de que el solicitante fallezca previo a tu inmigración a los Estados Unidos, la petición se anula de manera automática. Esto implica que no se concederá una visa a ninguno de los beneficiarios, y la solicitud regresará al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés).
Sin embargo, en situaciones humanitarias urgentes, puedes tener una alternativa al ponerte en contacto directo con el DHS. De esta forma, puedes solicitar la reinstalación de tu petición basándote en motivos humanitarios. Esto te permitirá, en circunstancias excepcionales, apelar en el proceso de inmigración.
Es esencial subrayar que si el solicitante fallece, la presentación de documentos por parte de un patrocinador alternativo el día de la entrevista no restablecerá la petición. Para avanzar con el caso, se requiere recibir una notificación del DHS que confirme la reinstalación de la petición. Evalúa todas las opciones disponibles y analiza las posibilidades de tu caso con un abogado especializado en inmigración.
Otras Opciones
En cambio, si ya te has establecido como residente y el solicitante fallece durante ese período, la situación experimenta pequeñas variaciones. En esta circunstancia, los beneficiarios secundarios (generalmente los hijos del beneficiario principal) aún podrían cumplir los requisitos para solicitar su visa.
Por ende, tendrás que suministrar la documentación que normalmente proporcionaría el peticionario para la entrevista de visa de inmigrante. Esto demuestra que, incluso en situaciones desafiantes, existen oportunidades para que los beneficiarios secundarios continúen con el procedimiento.
Otra vía para preservar la opción de buscar un beneficio migratorio tras el fallecimiento del solicitante se encuentra en la legislación. El capítulo 9 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad establece un marco legal específico para situaciones de este tipo. Por este motivo, es imperativo contar con la orientación de un abogado especializado en inmigración que pueda evaluar tu situación. Basándose en su experiencia, tomará la decisión más adecuada para avanzar tu posición legal hacia una fase más favorable.
Toma en cuenta estos consejos si estás atravesando un procedimiento de esta índole:
- No estás solo. Busca respaldo en tu círculo familiar, amistades y aquellos a quienes creas que pueden brindarte apoyo durante esta situación.
- Consulta a un experto en derecho migratorio. Resulta esencial contar con la guía de un abogado especializado en inmigración con experiencia en situaciones similares.
- Informa el fallecimiento de inmediato. En caso de que el solicitante fallezca, es fundamental notificar a las autoridades migratorias lo más pronto posible. Esto puede tener repercusiones en el desarrollo del proceso y es crucial para tomar decisiones bien fundamentadas.
- Reúne la documentación relevante. Agrupa todos los documentos pertinentes, incluyendo certificados de defunción, pruebas de residencia, correspondencia y demás documentación esencial para tu caso.
- Explora opciones para los beneficiarios secundarios. Si eres un beneficiario derivado, asegúrate de comprender tus derechos y opciones dentro del proceso.
- Evalúa posibles exenciones. En ciertos casos, podría ser necesario solicitar una exención de inadmisibilidad. Si este es tu caso, colabora con tu abogado para determinar si eres elegible y cuáles son los pasos a seguir para obtenerla.
